Soy una persona bastante tímida de primeras, soy vergonzosa, también insegura, miedosa. Aparentemente parezco más simple de lo que soy (tal vez sea porque prefiero despreocuparme de las cosas), como el piano de la foto; tan sobrio a primera vista. Me gusta tener la cabeza en orden, sin embargo, mientras me centro en ello todo lo de mi alrededor parece un pequeño caos (las partituras desparramadas por el suelo), sí, tampoco le doy demasiada importancia (al contrario que mi madre...) Soy muy reservada, me cuesta abrirme a la gente, pero una vez que lo hago tomo rienda suelta y cojo toda la confianza posible, o a eso aspiro. Esto me recuerda a mi instrumento favorito, el que llevo tocando desde los 8 años y con lo que más a gusto me he sentido en mi vida. Es un instrumento que nadie sabe cómo es por dentro, hasta que en un momento de curiosidad se decide a abrir las pesadas barreras que lo protegen. Soy una persona muy racional, me gusta pensar las cosas antes de hacerlas,
